En el siglo XVI, Avilés era la segunda ciudad más importante de Asturias y uno de los principales puertos del norte de España. La política expansionista de Felipe II se traducía en amenazas continuas de los corsarios franceses e ingleses que mantenían en constante alerta a los habitantes de la villa de Avilés. No es por ello de extrañar que sus gentes fueran tan diestras en las artes marítimas como las militares.Juan de las Alas de la Vega, pertenecía a la ilustre familia de los Alas de Avilés, había sido gobernador de Flandes, en cuyas guerras se distinguió al lado del Emperador Carlos V. Después se uniría a Francisco Pizarro en la conquista del Perú, donde fundó un mayorazgo.
Don Juan de las Alas fundó el lugar de Fiame, en Verdicio (Asturias). Del siglo XVI data el palacio de Fiame, la capilla y la torre del homenaje (que aún se pueden visitar).
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