19 de enero de 2007

Amor, Química y Divorcio


Los síntomas del enamoramiento: euforia, hiperactividad, pérdida de apetito y de sueño, esta sintomatología es producto de los altos niveles de dopamina y noradrenalina ( estimulantes naturales).Pero aproximadamente al cabo de un año, el cerebro ralentiza la producción química y la pasión se deteriora.

El cerebro humano fomenta tres aspectos del amor: lujuria, atracción y unión.
La lujuria es producto de la testosterona y es la causante del impulso inicial que nos hace buscar pareja.
Luego, la atracción, el enamoramiento verdadero, que se atribuye en parte a los bajos niveles de serotonina (+ ), una sustancia química que se encuentra en el cerebro y que se relaciona con la sensación de bienestar.
La unión es el sentimiento más duradero, mucho más que la lujuria o el enamoramiento, pero también puede menguar o quedar relegado por otros sentimientos.

Cuando estamos enamorados , lo hacemos impulsados por la unión de estos tres sentimientos: lujuria , atracción y unión. Sin embargo, el cerebro no mantendrá esa mezcla para siempre. No estamos hechos para asentarnos tranquilamente en una relación duradera.

Al igual que los trastornos obsesivo-compulsivos, el pensamiento intensivo en la pareja se relaciona con bajos niveles de serotonina. El cerebro comienza a producir feniletilamina a gran escala y así es como "perdemos la cabeza" y vemos el mundo de "color de rosa" .
Esta actividad perdura de 2 a 3 años, incluso a veces más, pero al final la atracción bioquímica decae. La fase de atracción acaba .La pareja, entonces, se encuentra ante una crisis : separarse o habituarse a manifestaciones de amor -compañerismo, afecto y tolerancia .

Con el tiempo el organismo se va haciendo resistente a los efectos de estas sustancias y toda la locura de la pasión se desvanece gradualmente, la atracción no dura para siempre y comienza entonces una segunda fase que podemos denominar de "pertenencia" dando paso a un amor más sosegado.

El amor ha evolucionado y esto es lo que nos permite establecer distinciones entre parejas potenciales de apareamiento o conservar la energía de apareamiento y enfocarla sólo en una pareja.
Cuando se tienen hijos, el cerebro ya ha pasado a la fase de la unión, un estado caracterizado por sentimientos de seguridad, comodidad y unión espiritual con una pareja estable. Esta etapa se produce como resultado del aumento de los niveles de vasopresina y oxitocina.




















La corteza prefrontal calcula constantemente las condiciones y deficiencias de una relación ,y serán estos cálculos los que decidirán la fecha…del divorcio .

La química del divorcio no se limita a los agentes cerebrales que inducen nuestras emociones.Es un paso más complejo, en el que prima el aspecto más racional del ser humano , con demasiados factores y variables a tener en cuenta.
En todas las sociedades, el momento en que una pareja tiene mayores probabilidades de divorciarse se ubica en el cuarto año de relación. Se cree que este ciclo es una reminiscencia de la temporada de reproducción de nuestros antepasados.
Pero, como en todo, hay excepciones que indican que hay parejas que alargan este período a 25 años, haciéndolo coincidir con las “bodas de plata".He conocido al menos un caso.



Instituto de la mujer

1 comentario:

Muxfin dijo...

Creo que el vídeo La química del amor, se complementa muy bién con tu post.
Un saludo