1 de junio de 2018

Que si quieres arroz Catalina


El arabista Federico Corriente ocupará la silla «K» de la RAE.

Extraído de "La investigación de los arabismos del castellano en registros normales, folklóricos y bajos". Discurso leído por FEDERICO CORRIENTE (20 de mayo de 2018, REAL ACADEMIA ESPAÑOLA)

Expresiones que se tomaron del árabe andalusí:
Que si quieres arroz, Catalina (tiríd ‘ala rrús, aqṭá‘ lína / ‘¿quieres a este esposo ante todos. Acláranoslo’).
A trancas y barrancas (atrakkán barrámka /‘busca un rincón con la yegua para defenderte de varios atacantes’)
Dar el agua, dar la voz de alarma (aw‘á ‘/¡cuidado!’).
¡Agua va! (aw‘á ba‘ád /‘¡cuidado, pues!’)
Anda allá / anda la osa (abreviaciones variables del árabe andalusí ‘ámda, la ausá‘ alláh / ‘¡qué horror, Dios no deje el mal crecer!’)
Ángela María (inǧilá almaríyya /‘desvelamiento de la novia’, ‘quedar la realidad a la vista’)

Encontramos muchos arabismos en las canciones populares e infantiles, y actividades lúdicas:
Nana, nanita (nám, nám, nám ínta / ‘duerme, duerme, duérmete tú’)
Matarile (má tarí li ‘/¿qué me ves?)
Carabí hurí carabí hurá (kárbi urí, kárb yurá /‘mi pena se ha visto, mi pena se verá’)
Titiritero (tiríd tirí / ‘¿quieres ver?’)
Recodín recodán (ráqid ánt ruqúd antúm/ ‘tumbado estás tú, tumbados, vosotros’, según la descripción conocida de este juego infantil).
Ala alima alimón ( alā ‘alima al‘ālimūn ‘ea /'sepan los que deben saber’, del árabe clásico, requerido por el registro oficial de los pregones)
También es notoria la existencia en nuestra lengua de una serie de interjecciones, de las que las más pronunciables e inocentes son jo y jolín, se trata de una abreviación del grito ritual de guerra del beduino que, al herir a su enemigo, le decía: ḫuḏhā o ḫuḏ lī / 'toma esto de mi parte'.

Del árabe ḫuḏhu biṭāqah /‘tómalo, a la fuerza’, del segundo término deriva: batacazo.

Otras incorporaciones relativamente recientes al catálogo de arabismos son las voces castellanas ademán (ḍamán), adrede (AD+riḍá), atracar (atraqqá), loco (láwqa), mohíno (muhín), riesgo (rízq) y zafio (ṣáfi).